El peronismo trabaja para afianzarse como la principal oposición y establecer su rumbo hacia 2027.

La coalición Fuerza Patria llega a las elecciones con el objetivo de fortalecer su presencia en el Congreso y ordenar sus distintas corrientes internas tras la derrota de 2023.

El peronismo, nucleado bajo la alianza Fuerza Patria, afronta las elecciones legislativas de este domingo con una doble meta: convertirse en el principal bloque opositor al gobierno de Javier Milei y reordenar su estructura interna de cara a las presidenciales de 2027.

La coalición, que competirá en 13 de los 24 distritos del país, fue presentada oficialmente el 9 de julio con la intención de reagrupar al justicialismo tras la derrota electoral de 2023. Sin embargo, la convivencia entre las distintas vertientes -el kirchnerismo, el massismo y el emergente kicillofismo- generó un delicado equilibrio político sostenido sobre una dinámica constante de negociación.

La victoria peronista en Buenos Aires el pasado 7 de septiembre, donde el oficialismo sufrió una dura derrota, reforzó la posición del gobernador Axel Kicillof dentro del espacio. Su gestión y su triunfo provincial lo proyectan como uno de los nombres con mayor proyección hacia 2027, aunque persisten tensiones con otros sectores del PJ que cuestionan su estrategia de desdoblar los comicios y su protagonismo en la campaña bonaerense.

Pese a las diferencias internas, el mensaje común del espacio es claro: frenar el avance del oficialismo libertario y reconstruir una fuerza política con capacidad de ofrecer una alternativa nacional. Desde su conformación, Fuerza Patria se propuso actuar como contrapeso institucional frente a las políticas de ajuste implementadas por Milei durante sus dos primeros años de gobierno.